Hablemos de la técnica de Grounding y porqué su práctica te ayudará a conectarte con tu interior.
Para empezar ¿qué es Grounding?
En pocas palabras, es conectar tu cuerpo con la Tierra, ya sea con los pies, sentado, parado, de rodillas, con tus manos o con tu espalda. Es traer a tu cuerpo a la tierra de manera consciente.
A diario estamos en contacto con la Tierra, pero pocas veces somos conscientes de las sensaciones que produce en nuestro interior. Y de acuerdo a diversos estudios, está comprobado que practicar grounding ayuda a reducir nuestros niveles de estrés y ansiedad de manera significativa.
¿Cómo puedo empezar a practicarlo?
Una de las mayores ventajas del grounding es que no necesitas de mucho para practicarlo.
Camina en el pasto con los pies descalzos: en tu jardín o en un parque, camina por unos 15-20 min descalzo y menciona 3 cosas que puedas percibir (Textura, sensaciones, olores) y presta atención a lo que estás sintiendo.
Camina sobre rocas: Lo mismo que con el pasto, pero con rocas, nota si están lisas, mojadas o secas, si tienen tierra.
Mete tus pies en agua: Cómo se siente al sumergirlos, es caliente, tibia o fría, te relaja o te tensa.
Usa tus manos: toca el pasto con tus manos, o la tierra, arena, o sumérgelas en agua y presta atención a todas las sensaciones que te provoca.
Recuesta tu espalda: hazlo lentamente, siente como cada parte de tu espalda va tocando el piso. Siente a tu cuerpo estirarse y relajarse.
No tienes que hacer estos ejercicios diarios, puedes hacerlos 1 o 2 veces por semana, con ello, te ayudará de manera considerable a reducir tus niveles de ansiedad y estrés.
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